Federico, el papelero

Federico López Martín (1880-1942) es el segundo de una saga de profesionales de Pozuelo de Alarcón: los vendedores de periódicos (papeles). Junto a otros miembros de su familia* aparece en el callejero de la ciudad; en la Colonia Buenos Aires, conocida popularmente como "de los papeleros", donde residió durante décadas y en la que siguen viviendo sus descendientes.

El padre de Federico López, Juan Antonio, es el primer papelero recordado. En las últimas décadas del siglo XIX se levantaba a las cinco de la mañana y marchaba caminando a Madrid para buscar los periódicos que después repartía en las colonias.

La calle Federico López se sitúa en un barrio separado por la vía del ferrocarril sobre los terrenos que en su día fueron de su propiedad; una gran finca conocida como "El cerro", atravesada por el arroyo del Tesoro, que hace un siglo hombres y animales cruzaban a través de un puente.

Brígida Ucedo, esposa de Federico López

Federico López se dedicó al mismo oficio que su padre: la venta de periódicos. Además poseía la distribución exclusiva de la lotería del Rey Alfonso XIII. El papelero se casó con Brígida Ucedo nacida en la aldea zaragozana de Brea de Aragón que da nombre a otra de las calles de la Colonia Buenos Aires. Federico y Brígida tuvieron cinco hijos: Brígida, Federico, Pilar, Antonio y Eduardo. Dos de ellos siguieron los pasos del padre y del abuelo.

Antonio López, hijo de Federico, con El Liberal en
el camino de Boadilla del Monte. Enero de 1936

Arena y Habanos

Para sacar adelante a su numerosa familia estaba pluriempleado. También vendía arena que extraía de los arroyos de Pozuelo y trabajaba por las noches de cerillero en Casa Camorra, un club situado al final de la madrileña Cuesta de las Perdices -en la Carretera de la Coruña- que comenzó su actividad como Parador de Ruta a principios del siglo XX y después se convirtió en lugar de diversión de una selecta clientela masculina.

Federico contaba a los suyos que en Casa Camorra alguno de los que le compraban un puro habano lo encendía con un billete de mil pesetas; con el retrato del rey Carlos I en el anverso y la portada del Alcázar de Toledo en el reverso.

En Pozuelo (6-10-2016)