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| Centenarios 2009
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Arsenio Jimeno (en el centro) con Wenceslao Carrillo y Luis Araquistain |
ANTONIO UTRERA | El tener que dedicar la atención a otras actividades y a otros apartados de la página que suscitan mayor interés, como las noticias y el Foro de debate, impiden a veces atender con la debida diligencia a aspectos que fueron tradicionales a lo largo de los 10 años de existencia con que cuenta el portal de Calatayud.
Hora es pues de retomar alguna de aquellas tradiciones,
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como lo era el recoger, a principios de cada año, los hechos más destacados de aquellos personajes que nacidos o que vivieron en nuestra ciudad o en su comarca, cumplían a lo largo del año que se tratara uno o varios centenarios.
Así, y con algo de retraso respecto a la fecha habitual, quiero traer a esta página la figura de Arsenio Jimeno Velilla, del que se cumplen cien años de su nacimiento, y que vio la luz, en 1909, en la localidad de Fuentes de Jiloca.
Dirigente socialista. De familia de artesanos y campesinos, realizó en Zaragoza y Tarrasa estudios de técnico industrial. A los dieciocho años, en plena Dictadura de Primo de Rivera, ingresa en el PSOE y UGT, y es elegido años más tarde vocal del Comité Nacional del PSOE. En estos primeros años de la República es presidente de la Federación provincial zaragozana de las Juventudes Socialistas. Primer secretario de la constituyente Federación Aragonesa de Agrupaciones Socialistas, creada en 1933. Candidato a diputado por la circunscripción de Huesca en noviembre de este año. Director en funciones del semanario socialista Vida Nueva.
En 1935 sufre su primer destierro en Francia, donde permaneció hasta 1936, año en que retorna a Zaragoza donde le sorprende el golpe de Estado; pudo abandonar la ciudad a finales de este año. Incorporado al Aragón republicano, fue designado consejero de Instrucción Pública del Consejo de Aragón, establecido en Caspe. Durante ese tiempo dirigió, desde junio el diario El Día, órgano del Frente Popular de Aragón, del que era presidente. Disuelto el Consejo, se incorporó al Ejército como comisario de batallón, y pasó finalmente a Francia en febrero de 1939. En este país, bajo la ocupación alemana, actuó como secretario general del PSOE clandestino, simultaneándolo con igual cargo en UGT, desde entonces no dejó de pertenecer a la dirección nacional de ambos organismos en el exilio. Director de El Socialista en dos etapas, así como de la revista Acción y del periódico sindical España obrera. Partidario de interiorizar las direcciones nacionales del PSOE y UGT, tuvo un importante papel en el XII Congreso (exilio) Socialista en 1972 para conseguir este objetivo.
Una grave operación que le privó de faringe puso fin a su actividad política y sindical en el pleno nacional, al advenimiento de la democracia en España. A su vuelta a España, fue elegido presidente del constituido Partido Socialista en Aragón (1978), siendo asimismo elegido presidente de honor de las Juventudes Socialistas de Aragón. Orador fogoso, publicó numerosos folletos sobre socialismo y sindicalismo, entre ellos El socialismo y el Estado (prólogo de F. González), El camino de la libertad, así como la reproducción de gran número de discursos pronunciados en Francia. El 25 de junio de 1991, Jimeno fallecía en Zaragoza.
Menos importante que el anterior, pero no por ello menos digno de recuerdo, es el poeta bilbilitano Ángel Raimundo Sierra, que, como el primero, nació en 1909, en Calatayud, un 2 de octubre. Apenas asistió a la escuela, pese a ello ha sido uno de los mejores poetas bilbilitanos. Empezó a escribir por vocación desde muy joven. Con solo diez años ya estaba trabajando en la imprenta que editaba El Regional, donde adquirió toda su cultura y su personalidad poética, y donde publicó sus primeras composiciones.
Colaboró en las revistas El Ganso y Vicor, ambas de Calatayud, en muchas de las revistas y diarios zaragozanos, en multitud de programas de fiestas, e incluso en revistas de Buenos Aires y Nueva York. Concurrió a multitud de premios y concursos literarios, ganándolos en varias ocasiones. En 1950, coincidiendo con una racha de tales premios, los poetas locales le rindieron un homenaje. Falleció en nuestra ciudad el 28 de enero de 1992.
Títulos como Azul (1933), La voz íntima (1954), Riberas de mi afán (1979), Navideñas (1985), A los pies de mi patrona. Historia de la imagen de Nuestra Señora de la Peña y avatares de su santuario (1983) o Amor y esperanza (1989), componen su bibliografía.
Terminaré con José de la Consolación, fraile agustino recoleto, que nació en Villafeliche en 1769 y falleció, según todos los indicios, en Luceni, en 1809. Se cumple pues, el segundo centenario de su muerte.
Vivió los dos sitios de Zaragoza, durante la guerra de Independencia, y gozó de cierto prestigio no solo entre la población, sino también cerca del propio general Palafox, del que era íntimo consejero. En 1809, gravemente enfermo el general, fue nombrado miembro de la Junta Gubernativa. Desde ella votó hasta el final contra la capitulación de la ciudad. Ocupada Zaragoza por los franceses, es enviado por éstos a Jaca con la encomienda de influir en la rendición de la capital del Pirineo. A su vuelta es exclaustrado y posteriormente preso en la Aljafería. Formando parte de una cuerda de presos camino de Francia, fue muerto a la altura de Luceni el 9 de diciembre de 1809. Se dice que su cuerpo, arrojado al Canal Imperial, fue encontrado el 5 de noviembre de 1916, y depositado en la sacristía de la iglesia de Luceni.
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