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El organero José de Sesma
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FRANCISCO TOBAJAS GALLEGO | Podemos pensar que Saviñán tendría una pequeña iglesia gótico-mudéjar, dedicada a San Pedro, cuando a finales del siglo XVI los obispos mandaban en sus visitas agrandarla, porque se había quedado pequeña para que pudieran caber en ella sus parroquianos. La nueva fábrica se contrató en 1626, de estilo barroco, por lo que la actual iglesia es del siglo XVII, no del siglo XVI como se apunta en su fachada.
Sabemos que en 1488 Jaime Arnaldín I trabajaba en un retablo para la parroquial de Saviñán. En el Archivo Parroquial se echan en falta varios libros, además de los ya comentados de bautismos, matrimonios y defunciones, correspondientes a buena parte del siglo XVII de las dos parroquias. Tampoco están los libros de Gestis, de entradas de beneficiados, capellanías, obras, gastos, contratos… El patrimonio artístico perdido también es considerable. Se perdió el retablo renacentista de la parroquia de San Miguel, debido a Juan Martínez de Salamanca. Del retablo neoclásico sólo se salvo la magnífica escultura de san Miguel debida al taller de Carlos de Salas. En los años cincuenta Francisco Abbad Ríos aún pudo ver la imagen de san Miguel del antiguo retablo renacentista. En la visita pastoral del obispo Isidro Gomá, efectuada el 21 de octubre de 1929, se pedía que se custodiara con mejores precauciones el precioso díptico de marfil del siglo XIV del Nacimiento de Nuestro Señor. Pero hace solamente treinta años, la parroquia perdió su órgano plateresco debido a José de Sesma, que desde 1992 recibe el nombre del Patio que lo acoge, el Patio de la Infanta. Este patio que levantó el rico mercader judío Gabriel Zaporta en 1546, tomó el nombre de la infanta Teresa Vallabriga, que casó con el infante Luis de Borbón. En esta antigua casa de Zaporta murió Ramón Pignatelli en 1793.
El que fuera órgano de la parroquial de Saviñán fue malvendido en 1979, como "restos del órgano", a un anticuario de Zaragoza, por ochenta y dos mil quinientas pesetas. Había sido construido en 1692 por José de Sesma, como así lo atestigua una inscripción en el arca del viento, que dice: "Joseph de Sesma mefecit en Çaragoça año 1692".
En 1984 se presentaría un presupuesto para su restauración a la Diputación Provincial de Zaragoza, que no se llevó a cabo. En mayo de 1989 el Ayuntamiento de Granollers estuvo a punto de adquirirlo, pero en 1990 fue comprado por Ibercaja. El 3 de marzo de 1990 Ibercaja confió los trabajos de su restauración a De l'Om-Arrizabalaga Orgueners, entrando en taller el 23 de abril de aquel mismo año, en un lamentable estado. El 12 de octubre del mismo año se cerró el informe, memoria y presupuesto para su restauración, acompañados del trazado de la caja. El 15 de octubre de 1992, tercer centenario de su construcción, se dieron por concluidos los trabajos con su colocación en el Patio de la Infanta.
Los días 28, 29 y 30 de octubre de 1992 tuvo lugar el I Ciclo de órgano Juseppe de Sesma (ca.1625-1699). Asistí el 28 de octubre al concierto ofrecido en el Patio de la Infanta de Zaragoza, por José-Luis González Uriol, que tocó en el que fuera órgano de la parroquial de San Pedro de Saviñán piezas de Francisco Correa de Arauxo, Sebastián Aguilera de Heredia, Andrés de Sola, Pablo Bruna, Juan Cabanillas y Jusepe Ximénez. Según el organista González Uriol, todas estas piezas iban muy bien para el que fuera órgano de Saviñán. Estas composiciones guardaban todo el misterio y toda la alegría del alma española, en la que se mezclan el misticismo y la alegría, las notas graves y las notas agudas. La pieza de Pablo Bruna, el ciego de Daroca, con un ritmo cadencioso y un tanto triste resultó en verdad impresionante. La batalla de la última pieza de Ximénez fue espectacular. Allí coincidí con Carmen Sanjuán, quien comentó que su tía Consuelo Sanjuán, viuda de Paterno Pina, recordaba siendo niña al último organista de Saviñán. Era ciego y se llamaba Francisco. También asistió a este concierto Mariano Pina y la hermana de Joaquín Arévalo, que vivía en El Frasno. Al finalizar el concierto felicitamos a González Uriol, que por su apellido Uriol bien podía descender de esta parte de Aragón, cosa que él desconocía. Estuvimos hablando de las peripecias de este órgano excepcional y nos comentó que su venta había sido una gran "desgracia" para Saviñán. Una más.
Sabemos que en 1924 murió el que fuera organista de la parroquia de Saviñán, Francisco Valpuesta Bargas, que entonces era viudo de Jacoba Serrano Garza, que ya había fallecido en 1916. En la lista de electores de 1890 aparece citado Francisco Valpuesta Bargas, apuntándose que era ciego. Francisco Valpuesta debió ser el último organista que tocó el órgano de José de Sesma, según recordaba Consuelo Sanjuán.
Nicolás Sebastián Horno se hizo cargo de la parroquia de San Pedro de Saviñán en septiembre de 1992. Ante la marcha del entonces párroco de Saviñán, Jesús Moreno Led, a Santa María de Borja, quiso adecentar los salones parroquiales. Para eso me ofrecí para ayudarle con una exposición de pintura y con el sorteo de un cuadro. Jesús Moreno aceptó, pero no sabía si las obras que se estaban realizando en los salones se acabarían para esa fecha de las fiestas de san Roque. Por fortuna las obras se terminaron a tiempo y los salones se limpiaron la misma tarde de la víspera de las fiestas. Se vendieron doscientos sesenta y dos boletos, con los que se consiguió recaudar veintiséis mil doscientas pesetas, que fueron entregadas a Jesús Moreno. El último día de las fiestas se llevó a cabo el sorteo del cuadro donado.
En esta exposición se entregaba una hoja en la que se recordaba el esfuerzo de nuestros antepasados para levantar la nueva fábrica de San Pedro, contratada en 1626. También se citaba al canónigo Martínez Saldaña, al que se le debía la Sala Capitular, entonces convertida en salones parroquiales, parte de las obras de la ermita de San Roque y la capilla familiar de la Virgen del Rosario. "La antigua Sala Capitular y sacristía, que tantos fundados desvelos costaron a nuestros paisanos en el tiempo, siempre estuvieron abiertos y dispuestos para cualquier eventualidad, convertidos en Salones Parroquiales". Por ello el grupo cultural Sabinius Sabinianus quería colaborar y pedir la colaboración de todos, para recomponer estos salones de la parroquia, con el sorteo de un cuadro. Este grupo fue germen y raíz de la Asociación Cultural del mismo nombre, que se fundó en enero de 1993.
El 11 de agosto de 1992 vinieron a Saviñán unos padres franciscanos del barrio Oliver de Zaragoza, a los que acompañaban otros padres del Perú. Con ellos vino el P. Julián Heras, franciscano español de Burgos, que llevaba en el Perú cuarenta años. Todo comenzó con unas cartas que escribí el 23 de abril de 1992 y envié a la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Ica, y a los conventos franciscanos de Ica y de Ocopa, en el Perú. En ellas comentaba la participación de varios aragoneses en la historia de América, desde el encuentro o encontronazo de las dos culturas allá por 1492, también del P. Calvo, fraile franciscano nacido en Saviñán en 1810 y muerto en Ica en 1873. A vuelta de correo recibí la Historia de las Misiones, escrita por el P. Julián Heras. En otro envío recibí un tomo de la Historia de las Misiones Franciscanas, del P. Izaguirre.
Mi interés por el P. Calvo se debía a una visita a Saviñán del P. Severino Esteban, franciscano riojano asentado en Zaragoza, en busca de la partida de nacimiento del P. Calvo. Esto ocurría unos años antes, allá por 1986. José Álvarez me pasó una fotocopia de la partida de nacimiento de fray Vicente Calvo. Yo se la enseñé a José Martínez, quien escribió al Perú en busca de información. A vuelta de correo recibió unas fotocopias del capítulo nº 26 de la Historia de las Misiones, donde se relataba la muerte del P. Calvo, y unas postales del convento de Ocopa. Con esta información pude escribir un artículo incluido en el programa de fiestas de san Roque de 1992. Poco después, Pilar y Esperanza Vincueria Cormán, descendientes del P. Calvo, dejaron a José Martínez una fotografía de su antepasado y tres libros de Conrado Juariz titulados: Sarayacu, Las campanas de Sarayacu y Años difíciles, que me fueron de poca utilidad. Estos libros estaban escritos en 1960. El autor los había enviado al Ayuntamiento de Saviñán desde Ocopa, con fecha de 16 de marzo de 1962.
A raíz de esta visita de los padres franciscanos en agosto de 1992, quise colocar una placa en memoria del P. Calvo, en aquel año que se conmemoraba el IV Centenario del descubrimiento de América. Con la aprobación de Jesús Moreno, se encargó el 24 de agosto a los talleres de Muel. Pasé a recogerla a finales de octubre y Carmelo Perales la colocó el 7 de noviembre de 1992 en la fachada de la parroquia. Con anterioridad se dio conocimiento del proyecto al Ayuntamiento de Saviñán, con fecha de 7 de septiembre, por si pudiera haber algún impedimento.
Como este proyecto se había apalabrado con Jesús Moreno y ya había sido trasladado a Borja, tuve que hablar con el nuevo párroco, Nicolás Sebastián, quien me preguntó si la gente conocía a este misionero de Saviñán. Para ello había escrito un artículo que fue publicado en el programa de fiestas de ese mismo año de 1992. También me preguntó si había hablado con el Ayuntamiento, no ya en cuestión de permisos, sino para sacar adelante el proyecto en común. El proyecto era personal y particular y no se había pedido colaboración de nadie. Como ya estaba apalabrada la colocación de la placa en la fachada de la parroquia con el anterior párroco, Nicolás Sebastián respetó el compromiso. La placa dedicada al P. Calvo le pareció respetuosa. En las homilías del sábado 7 y del domingo 8 de noviembre, el párroco informó a los parroquianos que un grupo de gente se había preocupado en escribir al Perú y recabar información. Pilar y Esperanza Vincueria quisieron costear los gastos de la colocación de la placa, pero se les dijo que todo estaba ya pagado.
Todo esto viene a colación porque en aquellas entrevistas con el nuevo párroco, para la colocación de la placa en la fachada de la iglesia, Nicolás Sebastián me comentó que el restaurador del órgano de Saviñán, José-María Arrizabalaga, había estado en Saviñán en busca de noticias, pero que no se las había podido ofrecer por ser nuevo en esta parroquia.
Recuerdo que todos los domingos, después de la misa, subíamos al coro al catecismo, aún después de haber hecho ya la primera comunión. Nos sentábamos en los asientos de los beneficiados y allí nos preguntaban el catecismo de segundo grado, que pronto se nos atragantó de tal manera, que cada domingo poníamos cualquier excusa para decir que no nos había dado tiempo para estudiar. Recuerdo que era catequista María-Jesús Saló. En un extremo del coro estaba el órgano de José de Sesma. Ninguno podíamos vencer la tentación de tocar aquellas teclas duras y enclavijadas.
En el folleto publicado con el programa de este I Ciclo de órgano Juseppe de Sesma, celebrado en 1992, se incluían algunas fotografías del órgano de José de Sesma, con algunas noticias sobre este órgano plateresco, además de la biografía de este organero zaragozano de origen navarro.
La caja del que fuera órgano de Saviñán era de madera de pino albar o pino royo. El macizo de la Batalla era de madera de cerezo, los cabos de las correderas, palancas de tracción de registros y las teclas, eran de madera de nogal. El forro de las teclas manuales era de madera de olivo y las alzas de madera de palosanto. El secreto era macizo, con canales abiertos a pulso. La tracción de notas, directa, de abanico, y la de registros, de movimientos laterales, era anterior al invento de los tiradores. La Batalla era la segunda más antigua de todas las batallas existentes, solamente superada en antigüedad por la Batalla del órgano histórico de Zenarruza (Vizcaya).
En Heraldo de Aragón apareció el 27 de octubre de 1992, una amplia información referida a la presentación del que fuera órgano de Saviñán, instalado en el Patio de la Infanta. La presentación había tenido lugar el día 26 de octubre, contando con la presencia de Montserrat Caballé. Según José-María Arrizabalaga, "Sesma fue uno de los organeros más importantes de España. Trabajaba con una gran perfección y meticulosidad, lo que nos ha ayudado mucho a nosotros". En la recuperación de la caja se había empleado madera de edad suficiente para que no desentonara con la original. Para recuperar el teclado se tomó como modelo el teclado del órgano de Acered, obra también de José de Sesma. En total fueron cuatro mil horas de trabajo invertidas, para recuperar el órgano de José de Sesma, cuyos sonidos dejó a Montserrat Caballé "totalmente emocionada".
En 1992, siendo presidente de Ibercaja José-Luis Martínez Candial, se nombró a José-Luis González Uriol Organista Titular del Órgano Histórico de Joseph de Sesma del Patio de la Infanta.
El 4 de junio de 1993 se organizó un concierto de órgano para la "villa de Sabiñán", a cargo de José-Luis González Uriol. En aquella ocasión tocó piezas de Pablo Luna, Andrés de Sola, Juan Cabanilles y Jusepe Ximénez, además de dos piezas de autor anónimo. Como en el folleto editado para el I Ciclo de órgano Juseppe de Sesma de 1992, no se incluía ningún dato del órgano de Saviñám, al finalizar el concierto entregué al restaurador José-María Arrizabalaga los datos que ofrecía José Gracián en sus Notas para la historia de Saviñán. Estos datos sí que fueron incluidos en el libro sobre el órgano de Saviñán, editado por Ibercaja en 1995.
En el nuevo Ayuntamiento de Saviñán, que fuera inaugurado el día de san Antón de 1995, se guarda la llave del que fuera órgano parroquial de Saviñán, que fue entregada por el Presidente de Ibercaja a la entonces alcaldesa de Saviñán en julio de 1993.
El 22 de marzo de 1995, Ibercaja fletó dos autobuses para todos los vecinos de Saviñán que quisieron asistir a un concierto de órgano en el Patio de la Infanta, a cargo de Marisol Mendive. Mendive había realizado estudios de piano y solfeo en el Conservatorio de Música de Zaragoza, obteniendo el título de profesional del órgano con el profesor González Uriol, cursando más tarde estudios superiores de órgano en el Conservatorio Municipal de Barcelona y estudios de Armonía y Contrapunto en Pamplona. Entonces era miembro fundador y presidenta de la Asociación de Amigos del Órgano de la provincia de Huesca. También era organista titular del santuario de Torreciudad, Huesca.
En el concierto se interpretaron obras de los compositores alemanes Johann Pachelbel, Juan Sebastián Bach y Johann Kuhnau, del inglés John Bull y de los españoles Pablo Bruna, de su sobrino Diego Xaraba, del franciscano Larrañaga y de un autor anónimo, cuya sonata octavo tono interpretada en el concierto, se encontraba en los libros parroquiales de la catedral de Albarracín.
El 22 de junio de 1995 tuvo lugar en el Patio de la Infanta de Zaragoza, la presentación de un cuidado e interesante libro debido a José-María Arrizabalaga, Pedro Calahorra y José-Luis González Uriol, dedicado al órgano que José de Sesma construyera para la parroquial de Saviñán en 1692. En él se ampliaban las noticias sobre este órgano.
En el transcurso de su restauración habían aparecido algunos manuscritos, hojas de periódicos, licencias para dar sepultura y una partida de defunción. Los tubos del tambor aparecieron forrados con hojas de un antiguo misal, los conductos de la Corneta con hojas de un libro, probablemente incunable, sobre temas canónicos o decretales, y el Conducto general con hojas de otro libro. Aparecieron más de cincuenta Licencias para dar sepultura, entre enteras y fragmentos, del Juzgado Municipal de Saviñán, de los años 1881 a 1886. En ellas constaba el nombre y la edad del finado, así como el día, la hora y la causa de la defunción. Una de las partidas de defunción era la referida al niño Jesús Lahuerta Acerete, que había muerto a causa de enteritis ulcerosa. Estaba firmada por el médico Ángel Caballero. Jesús Lahuerta Acerete, hijo de Antonio y de Rosa, de un mes y ocho días de edad, recibió sepultura el 10 de agosto de 1886. Aquel año murieron diecisiete adultos y treinta y dos niños de corta edad. Los niños morían de eclampsia, enteritis ulcerosa, tisis pulmonar, meningitis, neumonía, bronquitis capilar, sarampión, fiebre tifoidea, congestión pulmonar, tabes mesentérica o epilepsia.
También aparecieron fragmentos de El Correo Español y del Diario Tradicional de 1903, y del Diario de Zaragoza de 1904. Se encontró también una tarjeta de Louis Lebateaux, Fábrica de tubos de Órganos para Iglesias y Salones, Calle Ancha (Monje) 50, Barcelona (Gracia). En el Conducto General estaba escrito a tinta: "Dn. José María Lasierra, Presbítero, Regente de la Iglesia Parroquial de San Pedro Apóstol del lugar de Sabiñán, Provincia de Zaragoza, diócesis de Tarazona". Y a lápiz: "Se trasladó y restauró todo el órgano en noviembre de 1894. Organeros Dn. Pascual González e hijo Dn. Pascual". Y a tinta: "Joaquín Anadón Martínez. Esteban Hernández del Frasno". Y a lápiz: "Trasladó y alargó este canal el carpintero Delfín Lázaro (rubricado). Sufragó los gastos de la traslación y restauración Dn. Federico Crespo. Dios le ampare su alma".
El órgano sufrió una reforma en 1904. Se le añadieron cuatro notas en los Bajos y diez en los Tiples. Desaparecieron las Dulzainas y casi el Lleno y la Címbala, quedando el órgano maltrecho.
José de Sesma era hijo del también organista Martín Navarro de Sesma, que casó con Jerónima Miranda, hija del pintor Luis-Alberto Miranda. Martín Navarro de Sesma se había encargado del cuidado de los órganos de la catedral de Huesca, entre 1617 y 1621. En 1628 construyó el órgano de Moyuela y el de Montearagón. En 1633 construyó el órgano de Malanquilla, en cuyo secreto aún puede leerse su nombre y el año. Entre 1631 y 1633 trabajó en la construcción del órgano del convento de los Padres Predicadores de Zaragoza y en 1644 en el órgano de la parroquial navarra de Monreal, obra póstuma.
Su hijo José de Sesma parece adoptar el apellido toponímico de Sesma, ya que procederían de este lugar de Navarra. Nació hacia 1625. Se procuró del buen oficio de Miguel Julián y Jaime de Sola, jóvenes mancebos organistas, hasta que tuvo como oficiales a sus hijos Jorge y Francisco. Colaboraron con José de Sesma el ensamblador Jaime de Ayet, el maestro carpintero Pedro Halconero, el tallista Juan de la Sala, el pintor dorador Jaime Sánchez y el escultor José de Fet.
En 1651 José de Sesma construyó el órgano de la catedral de Albarracín. En 1657 construyó el de La Hoz Vieja y trabajó en los de la iglesia del Pilar de Zaragoza. En 1660 aderezó el de Samper de Calanda y en 1663 construyó el órgano de Alcorisa, después de haber atendido el de la catedral de Tudela en 1662.
En 1664 José de Sesma construyó un órgano para la Magdalena, en 1666 para San Gil, en 1676 para San Miguel de los Navarros, parroquias de Zaragoza, y en 1685 construyó uno para Alloza. Estos cuatro órganos muestran una cierta uniformidad, trabajos que superaban a los anteriores. En esta época José de Sesma construyó nuevos órganos para Tamarite de Litera en 1670, Albalate del Arzobispo en 1676, Acered en 1678 y para Montón.
Trabajó en 1664 en el órgano del Colegio del Corpus Christi "El Patriarca" de Valencia, donde fue llamado "atento que era un gran oficial", concluyendo en 1665 el órgano de su padre para Monreal, además de trabajar en el de la parroquial de Santiago de Zaragoza. En 1666 trabajó en el órgano de San Gil. En 1671 volvió a trabajar a Tudela y en 1674 restauró los órganos de la catedral de Barcelona, donde volverá en 1677.
El órgano para la catedral de Teruel de 1685 se diferencia de los anteriores por un aumento de "mixturas" y registros de lengüeta, y por estructurar el instrumento en dos órganos, el mayor y el de cadereta, que colocará en la "restauración y apaño del órgano mayor" de Borja en 1698. En 1686 colocará "registros, trompetas reales y otros primorosos" en la iglesia parroquial de San Pablo de Zaragoza y "rehace de planta" el de Santa Cruz de Zaragoza en 1696, año que trabaja en el de Santa María de Calatayud.
En 1692 José de Sesma construyó el órgano de la parroquial de Saviñán, que le fuera encargado por su Capítulo Eclesiástico, cuyo escudo corona el órgano.
José de Sesma casó con Josefa de Orcoyen, hija de Juan de Orcoyen, pintor y dorador, y de Esperanza Franco, que era hermana de Antón y de Francisco Franco, escultores, arquitectos y maestros carpinteros. Josefa murió en 1662 y José de Sesma contrajo de nuevo matrimonio con Juana Martín en 1663. Sus hijos Jorge de Sesma Orcoyen y Francisco de Sesma Martín siguieron los pasos de su padre.
En sus Notas para la historia de Saviñán, José Gracián apuntaba que el órgano de la parroquiual de Saviñán había sido construido por José de Sesma en 1693 (sería el año de su colocación en la parroquia) y según contrato costó cuatrocientas setenta libras. La caja, obra de Juan de la Sala, costó cuarenta y tres libras. Con su colocación, los gastos ascendieron a mil libras. José Gracián afirmaba que José de Sesma estaba haciendo a la vez otro órgano para Morata. El organista se retrasó en su compromiso, según explicaba en una carta, porque estaba afinando el órgano de La Seo.
Primeramente el órgano se colocó sobre la puerta de la sacristía y se subía a él por la escalera del coro y escuela, pero cuando la escuela se destinó para casa rectoral en 1891, se construyó una escalerilla por la sacristía y en 1918 fue trasladado al coro, en donde se encontraba en la fecha de su venta. José Gracián llamaba sacristía a la antigua Sala Capitular, hoy salones parroquiales.
Mosén Juan-Antonio Bravo escribía de puño y letra en uno de los libros parroquiales, que la casa parroquial se había terminado el 20 de abril de 1891.
José Gracián contaba que en 1716 la escuela de niños se localizaba en lo que actualmente es casa rectoral. Entonces estaba de maestro Blas Monteagudo, a quien el Ayuntamiento le pagaba el sueldo desde san Juan hasta san Miguel. El resto del año le pagaba el Capítulo de San Pedro. José Gracián aún pudo ver una nota de ingresos por sepulturas que cobraba el Capítulo, quien parecía destinar estos ingresos al pago del maestro. Entonces Blas Monteagudo cobraba trece libras anuales.
En una visita pastoral fechada en 1553, debida al obispo Juan González de Munébrega, se pedía a los Jurados de Saviñán que tuvieran a una persona hábil para enseñar a los muchachos la doctrina cristiana.
Sabemos que en 1601 Juan de Aguerrizabal era maestro de niños de Saviñán. En 1694 era maestro Bartolomé Bendicho, que estaba casado con María Yangüas. En 1699 se citaba a Francisco Minguillón como maestro, que estaba casado con María Vicente. Algunos maestros también eran organistas de la parroquia. En 1710 eran padres José Barcelona, maestro de niños y organista, y Polonia Hernández.
Entre 1713 y 1731 era padre Blas Monteagudo, de Paracuellos de Jiloca, maestro de niños y organista, que estaba casado con María Villar. En 1742 Blas Monteagudo, maestro de niños en Illueca, puso un pleito al Ayuntamiento de Saviñán sobre un recobro de maravedís.
Entre 1752 y 1755 era maestro de niños Francisco Cortés. En 1753 y 1754 se cita como organista al mancebo Nicasio Cortés, seguramente hermano del maestro. En 1761 y 1762 se cita a Francisco Vidal como maestro de niños de Saviñán, que estaba casado con Isabel Urrea. En este año de 1762 se casaba una hija del maestro, llamada Vicenta Vidal Urrea, con José Yrenzola Marqueta, de San Miguel de Calatayud. El 23 de enero de 1769 moría José Ruzola o Yrenzola, de treinta y ocho años, que estaba casado con Vicenta Vidal. Era pobre y se enterró en el cementerio.
En 1765 aparece de maestro José Valero, que estaba casado con Juliana Nobal, de Ojos Negros, Teruel, y en 1768 se cita como maestro a Pedro Martín. Pedro Martín, de Aguilar, Teruel, había casado con María-Antonia Piqueras, de Calcena, siendo padres en Saviñán en 1772.
En 1807 ingresaba en la Cofradía de la Vera Cruz el maestro Andrés Villuendas, que estaba casado con María-Antonia Ximeno. En 1814 ingresaba el maestro Sebastián Moreno y su mujer Pía Abadía.
Sebastián Moreno aparece en 1819 como secretario de la Cofradía de San Babil. En una de las constituciones de esta Hermandad se decía que si alguno quería encargarse voluntariamente de hacer de secretario, se le admitiría al goce y privilegio de ella, sin pagar estipendio alguno. En 1821 Sebastián Moreno cobraba dos mil catorce reales y catorce maravedís. La maestra Melchora Cabañas recibía quinientos reales. En 1847 el maestro Sebastián Moreno cobraba tres mil quinientos veinte reales.
Pía Abadía, mujer del que fuera maestro de primeras letras de Saviñán, Sebastián Moreno, murió en 1823. Sebastián Moreno casó en segundas nupcias un año más tarde con María Morlanes, que era viuda de Joaquín Ibarra. María Morlanes ingresó en la Cofradía de San Babil, unida ya a la Cofradía de San Roque, en 1826. Sebastián Moreno fue también secretario del Ayuntamiento y murió en 1855 a los ochenta años de edad. Todavía permanece su lápida en el cementerio municipal de Saviñán.
En 1832 moría Manuel Pérez, de Bronchales, Teruel. Era Preceptor de Gramática, tenía cincuenta y cinco años y dejó siete hijos.
En 1856 era maestro Ambrosio Muñido, de Valencia, que estaba casado con Vicenta Urrea. Y en 1886 era maestro de primera instrucción José Nogueras, que estaba casado con Francisca Zuara.
En la visita pastoral a Saviñán, llevada a cabo en mayo de 1826, se prohibía el tránsito de los escolares por la iglesia. Y se pedía que dentro de cuatro meses se abriera otro camino para llegar a la escuela. Por ello llamaba la atención del Capítulo y del Ayuntamiento sobre este particular, "pues acostumbrandose los niños á pisar, correr y divertirse de mil modos en las Iglesias, que en aquella edad deben infundirles ya un temor majestuoso, después nada queda que llame sus corazones á la compostura y piedad con que deben asistir a las funciones augustas de nuestra Sagrada Religión".
En febrero de 2009 se anunció el XVII Ciclo de órgano Juseppe de Sesma, en el magnífico Patio de la Infanta de Zaragoza.
BIBLIOGRAFÍA
Archivo Histórico Provincial de Zaragoza. Pleitos civiles, caja 201-10.
Archivo Parroquial de Saviñán.
José-María ARRIZABALAGA, Pedro CALAHORRA y José-Luis GONZÁLEZ URIOL. El órgano del Patio de la Infanta, Zaragoza, 1995.
José GRACIÁN GASCA: Notas para la historia de Saviñán, 1919.
Ciclo de órgano Juseppe de Sesma (ca.1625-1699), Zaragoza, 1992.
De Gentes de mi tierra, 2009
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