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| El Colegio del Salvador
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FRANCISCO TOBAJAS GALLEGO | Nunca agradeceré bastante al profesor y amigo Mariano Amada el envío de un libro realmente útil y hermoso, debido a Luis Serrano Pardo y dedicado a Mariano Escar, Maestro del Arte de Imprimir, como alguna vez bautizó al tipógrafo Juan Moneva y Puyol. Mariano Escar había nacido en Zaragoza en 1870, muriendo en ella en 1932. Hacia 1900, Escar ya era regente de la imprenta de Emilio Casañal, situada en el Coso. En 1901 se hace cargo del taller tipográfico donde se imprimía La Derecha, en la calle de San Miguel 12, periódico que fuera fundado en 1881 por el médico, político y periodista Joaquín Gimeno y Fernández-Vizarra. Luis Serrano piensa que la decisión de Escar de establecerse como empresario, quizá estuviera condicionada por el proyecto de imprimir El Noticiero, un nuevo periódico de orientación católica, cuyo primer número salió el 1 de junio de 1901. La Derecha se siguió publicando hasta el 23 de agosto de aquel mismo año, realizándose su tirada, desde el 25 de abril, en el taller de Manuel Ventura, situado en la calle de San Pablo. Escar siguió tirando El Noticiero hasta el 8 de agosto, fecha en que se traslada a las prensas de Manuel Revilla, junto al Teatro Principal. De entre las obras impresas por Escar en su taller de la calle de San Miguel, cabe mencionar las dos novelas de Juan Blas y Ubide: Sarica la borda, de 1904, que se vendía a 3,50 pesetas, y El licenciado de Escobar, de 1905, que se vendía a 2,50 pesetas. De su taller salió en 1905, El Pedroso y el Templao, novela de José María Matheu. Escar es también el impresor de la segunda Revista de Aragón (1900-1905), entre los años 1903 y 1905, revista que fundaran el bilbilitano Eduardo Ibarra y Julián Rivera, y donde se publicaría en 1903 y por entregas la novela Sarica la borda. En 1909 Escar pasa a ser director técnico de La Editorial, situada en el Coso. Más tarde trabajaría en Madrid, en La Ilustración Española y Americana y, tras su paso por Valladolid, donde fue invitado por el marqués de la Casa Real para establecer una imprenta en la misma casa donde había residido Cervantes, volvió a Zaragoza para trabajar en los talleres de Heraldo de Aragón.
En 1905 Mariano Escar imprime en papel satinado un curioso libro que lleva por título: Reseña de la Fiesta celebrada por los antiguos alumnos de Colegio del Salvador de Zaragoza, en el vigésimoquinto aniversario de su fundación. En él nos enteramos que, para celebrar el 25º aniversario del colegio de los jesuitas, situado en el paseo de Sagasta 1, actual sede de Ibercaja, se había formado una Junta que acordó convocar a todos los antiguos alumnos el 23 de noviembre de 1904, día de San Clemente, fecha en que se celebraba el natalicio del fundador del colegio, Clemente Bofill. Y así, a las siete y media de la mañana de aquel 23 de noviembre, se celebró una misa de comunión general, con plática de Carlos Gabarró, rector del colegio. Tras el desayuno siguió la misa solemne, donde oficiarían antiguos alumnos. El panegírico estaría a cargo del P. Antonio Coscolla, antiguo alumno. En ella se interpretó la Misa de Eslava, el Gradual de Olleta y el Ofertorio de Haydn. Tras la misa se cantó el Te Deum del Maestro Olleta. A la una se serviría la comida y a las cinco de la tarde se celebraría en el Salón de Actos una velada literaria, interpretándose páginas escogidas de Wagner, Nesvbalda y Mendelssohn. El día 24 tuvo lugar, a las ocho y media de la mañana y en la capilla del colegio, una misa en sufragio de los profesores y alumnos fallecidos. A aquel aniversario sabemos que asistieron los hermanos José María Bascones Pérez, abogado, que vivía en Calatayud, y Luis Bascones Pérez, abogado-procurador, que vivía en la calle de San Miguel 12 duplicado de Zaragoza, Francisco Acerete Lavilla, de Fuentes de Jiloca, y José Gracián Gasca, de Saviñán. Se adhirieron al acto los bilbilitanos Pedro de la Fuente Pertegaz, Cecilio Granado de Pujadas y Justo Navarro Melero, además de Juan Ignacio Gracián Campos, de Saviñán, primo de José Gracián Gasca. José María Bascones casó con Juana Gracián Gasca, hermana de su antiguo compañero de colegio de Saviñán. Su hermano Luis Bascones casó con una hermana de Josefa Gasca Torrijo, de Paracuellos de la Ribera, con quien casó José Gracián Gasca.
Los jesuitas fundaron su primera escuela en el Real Seminario de San Carlos de Zaragoza, que se llamó Colegio de la Purísima Concepción, donde estudiarían José y Ramón Pignatelli, Baltasar Gracián y Vicente de Paúl. En 1871 se trasladarían a la antigua Plaza del Pueblo, actual del Carmen. El nuevo colegio, llamado ya del Salvador, tuvo que trasladarse a finales de la década, por el creciente número de alumnos, a un nuevo edificio del Paseo Sagasta, donde también estudió Luis Buñuel.
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