|
|
 |
|
| El puente de Saviñán
|
|
FRANCISCO TOBAJAS GALLEGO | Madoz, en su Diccionario Geográfico-Estadístico-Histórico (1845-1850), señala que desde Calatayud a Villanueva de Jalón no había sobre el río puente alguno notable y sólo existían algunos de madera, que las más de las veces se llevaban por delante las aguas del río en sus frecuentes avenidas. Al hablar de Morata de Jalón, Madoz nombra el magnífico puente de un sólo arco sobre el Jalón. Este puente se construyó entre el 14 de agosto de 1674 y el 16 de noviembre de 1677, fecha en que Juan de Marca presentó una relación de los gastos de la obra, que ascendieron a 9.024 libras y 16 sueldos, a Francisco Sanz Cortes, abogado y corregidor de Zaragoza, marqués de Villaverde, por concesión del título en 1670 por Carlos II, y conde de Morata, tras la compra en 1665 a Ana Polonia Martínez de Luna, condesa de Morata, de todo su patrimonio, incluido el título nobiliario.
Sabemos que en 1801 y 1837 se reparó el puente de Saviñán. El 13 de octubre de 1801, José Gracián Carrascón se dirigía por escrito al Intendente General, informándole de su intención de comprar un terreno situado en Trasmon, del que era dueño el Ayuntamiento de Saviñán. El Intendente General debió informar favorablemente a su requerimiento, pues el 22 de octubre el escribano de Saviñán Juan Santos Carnicer, da fe de una reunión celebrada en el Ayuntamiento, en la que estaba presente la Junta de Propios del lugar. Como había exigido el Intendente General, la tasación del terreno y las ruinas de un corral la habían realizado Felipe Ibarra y Andrés Pinilla, que les otorgaban un valor de 12 libras. En la subasta pública realizada previo pregón, José Gracián se quedó con el terreno por lo tasado, pues nadie mejoró su postura. Con la misma fecha la Junta de Propios exponía que ya se habían concedido al pueblo 150 libras para la reparación del puente. Al parecer esta cantidad era insuficiente porque el Concejo reconocía que había tenido que realizar un nuevo reparto entre el vecindario, con la intención de destinarlo a dicha reparación, pero lo recaudado lo fue entonces para el pago del subsidio correspondiente a los vecinos y terratenientes, por lo que la cantidad destinada al arreglo del puente seguía siendo menguada y la obra, al parecer de gran envergadura, debido a una gran crecida del río, estaba sin acabar. Por tanto se pedía que las 12 libras de la venta, junto con lo que se pudiera exigir de nuevo a los vecinos, sirviera para perfeccionar la reparación del puente del lugar. Al día siguiente Juan Lafuente escribió al Intendente pidiendo que se repitiese la subasta, alegando que no se había enterado. La nueva subasta se realizó el 15 de noviembre y José Gracián tuvo que subir su oferta hasta 41 libras y 10 sueldos para quedarse con el terreno y el corral. Por tanto el alcalde Judas Yepes, el síndico José Gumiel Gaspar y Juan Santos Carnicer, por los que no sabían leer, firmaban una nueva solicitud, pidiendo que el importe de la venta del terreno de Trasmon se pudiera destinar al arreglo del puente, pues una nueva avenida del río, ocurrida el 17 de noviembre, había dañado su estructura. Se aseguraba que esta era la única forma de repararlo, ya que los vecinos no podían participar en nuevos repartos, por estar absolutamente imposibilitados por las repetidas contribuciones. El Contador Principal de Zaragoza, con fecha de 24 de noviembre de 1801, aprobaba la venta y la utilización de su importe en la reparación del puente.
En 1837 se vuelven a realizar obras en el puente de Saviñán, en la puentecilla de Juan López y en la escuela de niños. En esta reparación se utilizaron maderas, clavos, hiniestas, yeso y cal. En esta obra se pagaron numerosos jornales. A varias mujeres se les pagó por llevar el agua necesaria para amasar la cal y el yeso. Los recibos estaban firmados por el alcalde Ramón Lafuente y otros por el comisionado Miguel Lasierra. Algunos de ellos iban dirigidos a Pedro Gracián, como responsable de su pago.
Los gastos de las obras, incluidos los de la escuela de niños, ascendió a 1.780 reales y 23 maravedís, aunque una nota avisaba que faltaba por pagar la madera y los ladrillos utilizados en el puentecillo de Juan López, por no haber recibido aún la factura del albañil Vicente Cormán.
El ex-alcalde Roque Carnicer, que lo había sido en 1836, había entregado para cubrir los gastos 1.200 reales, a los que se sumaban otros 260 reales que provenían de un apremio en la Serrezuela, donde el Concejo tenía una dehesa que daba en arriendo. El resumen de cuentas lleva fecha de 17 de julio de 1837 y está firmado por el alcalde Ramón Lafuente y por el secretario José Bono. El regidor del Concejo era entonces Ramón Morlanes. Los recibos de los diferentes gastos están fechados entre el 19 de febrero y el 4 de junio de 1837.
|
|
