Villafeliche era población
de los reyes de Aragón. Aparece mencionada por vez primera, según
Vicente de
la Fuente, en 1131, en el texto foral de Calatayud.
En 1205, Pedro II el Católico la dio a su madre, doña Sancha,
trocándola por Burbáguena, Seis años más tarde,
recuperada por el soberano, la cedió al Monasterio
de Piedra. Para recobrar su estratégico castillo, Jaime I dio
a los monjes ciertas salinas a cambio de aquél, en 1219. A partir
del siglo XIII, la necesidades económicas de la Corona hicieron
que Villafeliche estuviese casi siempre en manos de señores: los
Azagra (1333) y los
Luna (durante el siglo XV). El marqués de Camarasa era su señor
cuando la expulsión de los moriscos -que eran muchos en Villafeliche-,
en 1610. Hasta la extinción de los señoríos, permaneció
en ese régimen jurídico. En tiempos de Fernando el Católico
la poblaban unas doscientas familias musulmanas y unas sesenta de cristianos.
En 1610 fueron expulsados su más de 2.200 pobladores de religión
islámica. El censo de 1857 señala 1.327 almas, que han quedado
notablemente reducidas hasta las poco más de 250 con que cuenta
en la actualidad. (Guillermo Fatás Cabeza / Guillermo Redondo Veintemillas)
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