Lugar de la provincia de Zaragoza, a 84 kilómetros de la capital. Situado en el Sistema Ibérico, en el valle del Perejiles (afluente del Jalón), a 633 metros de altitud. Temperatura media anual, 12,9 grados C. Precipitación anual, 420 mm. Población: en 1998, 132 habitantes; en 1900, 261 habitantes; en 1950, 236 habitantes.

La localidad -el topónimo tomó apellido a partir de 1920- se sitúa entre Torres, barrio pedáneo de Calatayud, y Belmonte de Gracián, con su caserío al pie de la carretera y encaramado en la falda del monte, con tres torres sobre los cerros, restos del primitivo sistema defensivo del valle, y la iglesia también en lo alto.

El lugar perteneció a la comunidad de aldeas de Calatayud, sesma de Río de Miedes, y fue sobrecullida y Ayuntamiento bilbilitanos, hasta 1834, que formó Ayuntamiento propio.

La iglesia parroquial está dedicada a San Cristóbal, y fue construida en los siglos XVII-XVIII, reaprovechando elementos de una antigua mezquita, de la cual aún conserva las arcadas. Tiene fábrica de mampostería y tapial y es un edificio bastante modesto, de una nave con cubierta a dos aguas. La puerta de ingreso se abre con arco de medio punto; posteriormente le fue añadido el atrio, con arco rebajado y enlucida con yeso y cal. De la misma guisa aparece el primer cuerpo de la torre campanario, de planta cuadrada, con un segundo cuerpo de ladrillo, barroco, y chapitel piramidal. En el interior destaca el retablo dedicado a la Virgen del Rosario, obra salida con toda probabilidad de los talleres de Francisco del Condado y Juan de Velasco, dorado y estofado por el pintor Juan Ferrer.

Villalba celebra sus fiestas el primer domingo de febrero, en honor de Santa Águeda. También honra a la Virgen del Rosario, el primer domingo de octubre. (Alfonso Zapater Gil)