El casco urbano se configura con edificios de tapial y adobe -últimamente, también de ladrillo-, con sus fachadas revocadas en muchos casos de cemento o yeso y luciendo encaladas.

En la costa más alta del casco urbano se levanta la iglesia parroquial de la Asunción, un soberbio edificio de piedra de sillería, con dos portadas renacentistas de finales del siglo XVI. La torre emerge a los pies, en el lado del Evangelio, con su primer cuerpo, el que le sirve de basamento, de planta cuadrada, con remate de cuatro pilastras, una en cada esquina, entre las que se alza un segundo cuerpo de ladrillo, octogonal y de extraordinaria esbeltez, con chapitel piramidal alargado.

El templo se distribuye en tres naves y ábside