Castillo de Belmonte
Villa de antiguo poblamiento
que respondió al nombre de Secaisa
y en cuyo territorio se han encontrado importantes restos arqueológicos.
De su castillo se sabe que fue construido por los musulmanes en el siglo
X y que pasó a manos cristianas poco de comenzar el XII. Desde
entonces formó parte de la comunidad
de Calatayud, sesma del Río de Miedes.
Existen documentos atestiguando
que en 1357 los vecinos de Mara
y Ruesca
acudieron a defenderlo por ser el más importante de la zona, aunque
lo ocuparon los castellanos en 1362.
El castillo musulmán
se encontraba encumbrado sobre la cima del monte en el que se asienta la
villa, vigía excepcional sobre el río
Perejiles. En la actualidad sólo quedan restos de su recinto
fortificado, de planta ovalada, con unos ochenta metros de eje mayor por
cuarenta el menor. Toda la obra es de tapial y piedra, ya muy erosionada
por los elementos. Conserva dos pequeños torreones rectangulares
muy rebajados en altura. Dentro del recinto se encuentra la iglesia
de Nuestra Señora del Castillo, construida sobre los restos
de una torre. En un cerro próximo se alza una torre vigía
de planta circular y obra de tapial rodeada de un pequeño recinto;
pudo ser un torre de señales para completar la defensa de la población.
Además del castillo y las torres vigías, existe dentro del
caserío, emplazado sobre una plataforma natural, un imponente palacio
fortificado de aspecto militar, pues en tres de sus esquinas presenta torres
en talud acusadas en alzado y planta; la cuarta torre ya se ha perdido,
pero queda su base. No es fácil que este palacio fortificado fuera
construido por algún señor territorial, más bien es
de suponer que lo erigió la comunidad
de Calatayud como segundo castillo, con motivo de las invasiones castellanas
del siglo XIV. Fue configurado como palacio torreado, quizá para
residencia del alcaide y guarnición. (Aurelio Cabañas Bayano)
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