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ATEA |
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Iglesia parroquial |
| Arquitectura
| Heráldica
| Bibliografía
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El caso urbano está dispuesto longitudinalmente, al hilo del valle del Jiloca. Los edificios buscaron el llano para su asentamiento. La calle principal cruza de parte a parte el pueblo, configurando una gran plaza rectangular, extraordinario espacio abierto con zonas ajardinadas; después se abre la plaza de la iglesia, más recogida.
La iglesia parroquial está dedicada a la Asunción de la Virgen y es un edificio barroco, levantado a mediados del siglo XVII, a base de aparejo formado por encintado de ladrillo y relleno de mampostería. La torre se alza a los pies, al lado de la epístola, y es de escasa elevación. El interior del templo se divide en tres naves: la central cubierta con bóveda de lunetos y las laterales, de arista. El crucero, no
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armado en planta, se cubre con pechinas de tambor, sin linterna.
Diez son los retablos existentes, correspondientes a los siglos XVII y XVIII.
La devoción secular de los ateanos puede calibrarse por el número de ermitas que buscaron acomodo en su término municipal, dedicadas, respectivamente, a San Roque, Santa Bárbara, Santa Cruz, San Lamberto y Virgen de los Dolores. (Alfonso Zapater)
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