Restos del actual despoblado de Alcocer

Según narra el Poema de Mio Cid en su Cantar Primero, dedicado al destierro del protagonista, el Cid, abandonando Castejón -hoy Castejón de Henares- atraviesa el Campo Torançio, sito en el límite de las provincias de Guadalajara y Soria y se interna en territorio hoy aragonés, entonces dependiente del reino moro de Zaragoza. Siguiendo el curso del río Jalón deja atrás Ariza y sin llegar a Cetina pernocta con sus hombres en un lugar todavía sin localizar; el día siguiente prosigue viaje aguas abajo del río Jalón, dejando atrás Alhama de Aragón, Bubierca y Ateca, asentándose "en un otero redondo, fuerte e grand" con la intención de conquistar el castillo de Alcocer y de cobrar parias a las poblaciones limítrofes de Ateca y Terrer ante el desagrado de Calatayud.

Reconocido el terreno el Campeador elige el lugar más adecuado estratégicamente para el asentamiento de sus hombres, por su situación y por el fácil abastecimiento de agua, pues "açerca corre Salon, agua nol puedent vedar", a continuación ordena levantar el campamento e instalar las tiendas "las unas contra la Sierra e las otras contra el agua". El motivo de reforzar estos dos puntos especialmente obedecer al interés del Cid porque los musulmanes de Alcocer viesen asentado en ese lugar, justo en la ladera del cerro que baja hasta el río Jalón, intimidándoles de esta manera. Al mismo tiempo le interesaba reforzar la parte sur-suroeste donde está la Sierra, pues es este punto el único vulnerable desde el cual podía sufrir un ataque sorpresa por detrás.

Transcurridas quince semanas ­según datos del Cantar- y viendo que Alcocer resistía el asedio, decidió el Cid poner en práctica un ardid para conquistarlo. Los resultados fueron óptimos pues gracias a él se pudo tomar la plaza, arrasar prácticamente toda la población masculina del lugar y obtener pingües beneficios económicos.

Sobre la existencia de Alcocer y la famosa batalla que tuvo lugar entre las tropas moras de Valencia y las huestes del Cid, dando lugar a uno de los episodios más controvertidos del Cantar, se han escrito decenas de artículos, siendo la tendencia más usual la de dudar de su existencia debido al desconocimiento de que:

1. Desde al menos el siglo XIV hasta el siglo XVII la acequia actual de La Losa y San Julián se llamó acequia de Alcocer, discurriendo paralela al camino de Calatayud y lindando con parajes como El Ballestar y San Julián, hoy localizados y muy próximos a la Mora Encantada, lugar que proponemos para situar Alcocer, pues está al lado de San Julián, de la acequia de La Losa, del Ballestar; se encuentran en superficie numerosos restos de cerámica musulmana y cristiana y el topónimo Mora Encantada suele indicar un yacimiento arqueológico, véase el caso de Daroca o Borja por citar sólo dos ejemplos.

2. Se desconocía una noticia del año 1612 en la cual se obliga a Domingo Vellestar a poner remedio para que el agua que baja de un barranco por la parte de la torre de Alcocer no desemboque en la ermita de San Julián sino que discurra cerro abajo y desagüe hacia la parte de la pieza de la Vicaría, la cual está ya en el llano, concretamente en el paraje del Ballestar, muy próxima al río Jalón. (Francisco José Martínez García)